El reportaje de En tierra hostil sobre Corea del Norte no ha dejado indiferente a nadie. Parte muy importante de ese reportaje está protagonizado por Alejandro Cao de Benós un catalán de Tarragona que es el único occidental al servicio del Gobierno norcoreano. Según Cao de Benós el programa ha sido "manipulado para ofrecer una imagen sesgada de Corea del Norte. Habíamos pactado unas condiciones y no se respetaron", asegura.

"En Antena 3 me tendrían que poner una alfombra roja por lo que les he hecho a ganar tras la emisión de ese reportaje que fue líder de audiencia", remarca Alejandro en Espejo Público. Ha desmentido todo tipo de acusaciones sobre ejecuciones, campos de concentración o cualquier falta de libertad en Corea del Norte. "Si usted hace un reportaje en Corea del Norte, le pone una música terrorífica y después acaba den Corea del Sur con una música melancólica y se cree todo lo que le dicen, hay una total manipulación, me lo han dicho miles de personas", dice.

"Si usted hace un reportaje en Corea del Norte, le pone una música terrorífica y después acaba den Corea del Sur con una música melancólica y se cree todo lo que le dicen, hay una total manipulación, me lo han dicho miles de personas", dice. Cao de Benós no solo ha criticado el reportaje de En tierra hostil sino que se ha mostrado a la defensiva, "me han dicho que preparara las uñas que vendrían a por mí y que el programa estaba preparado".

Pero lo más sorprendente de las declaraciones de Cao de Benós en la entrevista que ha tenido en Espejo Público es cuando, tras ver el relato de una refugiada norcoreana en el que relataba las atrocidades que sufrió durante 28 años, ha deslegitimado su argumento asegurando que "para estar 28 años sometida a brutales palizas, esta señora tiene un cutis fantástico. Una persona que está sometida a que le den latigazos o les coman los perros no está en esas condiciones", lo que ha provocado que Albert Castillón abandone el plató.

Desde los 15 años Alejandro se ha interesado por los regímenes socialistas "en el momento más difícil cuando se estaban desmoronando", asegura. "Quería luchar por unos ideales de una sociedad más justa en la que se repeten los derechos humanos", afirma. "Hasta el año 2005 he estado trabajando por cuenta ajena. Mi último trabajo fue en la escuela de negocios del IESE que pertenece al Opus Dei donde he desarrollado la parte informática de uno de sus master. No he vivido del cuento. Pero cuando se enteraron de lo que me dedicaba en mi tiempo libre, la relación laboral se terminó. desde entonces trabajo en comercio exterior", así resume, Cao de Benós su trayectoria profesional.