En tierra hostil vuelve con la grabación inédita de un viaje clandestino que hacen emigrantes españoles en Brasil. Alejandra Andrade comprueba que es una práctica habitual entre jóvenes cualificados de 25 a 35 años, dispuestos a trabajar a toda costa en la profesión para la que han estudiado.

El equipo penetra en las favelas de Río de Janeiro donde viven profesionales que entran en el país como turistas, y acaban convirtiéndose en inmigrantes ilegales. El rodaje de En tierra hostil se produce en uno de los momentos más tensos de los últimos años: se está fraguando la ocupación policial de un complejo de favelas estratégico. Los narcos esperan multiplicar el negocio de la droga con las 20 millones de visitas, previstas hasta los Juegos Olímpicos.