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EN EL BRICONSEJO DE HOY..

Sellado de puerta de chimenea

Para que la chimenea funcione a pleno rendimiento, es conveniente revisarla de vez en cuando. En este caso, la junta que sella el cristal de la puerta está deteriorada y la hemos cambiado para evitar que salga el humo.

Lo primero que debemos hacer es abrir la puerta de la chimenea y quitar el material aislante, haciendo palanca con un destornillador. En las tiendas de bricolaje encontraremos aislantes de diferentes grosores. Nosotros nos hemos decantado por un cordón de fibra de vidrio trenzada, que tiene el mismo grosor que el que teníamos puesto.

Después de cortarlo a la medida que necesitamos, limpiamos los restos de adhesivo que hayan podido quedar en la junta pasando un paño humedecido en alhocol.

Acto seguido, damos en la llaga un pegamento cerámico que incluye el propio kit y colocamos el cordón.

Una vez que el producto se haya secado, ¡ya podemos encender la chimenea con total tranquilidad!

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