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SE ENCONTRABA A 6.000 KILÓMETROS DE DISTANCIA

Ve nacer a su hijo gracias a unas gafas de realidad virtual

El hombre tuvo que viajar a Queensland, a unos 6.000 kilómetros de su casa, y no podía estar en el nacimiento de su tercer hijo. Gracias a una gafas de realidad virtual pudo 'asistir' a ello.

La realidad virtual abre un nuevo mundo de posibilidades a la hora de disfrutar de contenidos y por eso casi todos los fabricantes han iniciado una carrera para despuntar con distintos cascos y ecosistemas.

Normalmente, solemos asociar la realidad virtual al entretenimiento y la formación. Con cascos como Oculus Rift, HTC Re Vive, Gear VR o los muchos que saldrán del proyecto OSVR de Razer es posible visitar lugares donde nunca se ha estado ni se podrá estar, como Marte, o experimentar videojuegos como nunca antes.

Sin embargo, la realidad virtual no solo sirve para ver películas o documentales de forma más inversiva o movernos por entornos virtuales; también es un gran aliado para experimentar eventos en directo en los que no podemos estar, pero de una forma increíblemente realista.

Esto le ha pasado a Jason Larke, un australiano que no podía asistir al nacimiento de su hijo, debido a obligaciones laborales. Unas semanas antes del nacimiento de su tercer hijo, su jefe le comunicó que tendría que viajar a Queensland a 6.000 kilómetros de su casa.

Larke ha visto a su mujer dar a luz, gracias a un 'streaming' en directo. No pudo tocar a su hijo, pero por lo menos pudo estar 'al lado' de su mujer en un momento tan importante.

Con momentos como estos crece la posibilidad de acercar aun más a las personas, haciendo de la distancia algo totalmente efímero.

En el vídeo se puede ver la campaña realizada por Samsung, para conseguir que Jason no se pierda el nacimeinto de su hijo.

 

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