Paisaje calcinado por los incendios forestales

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SEGÚN DATOS DE LA XUNTA

La superficie quemada en esta oleada de incendios en Galicia se estima "superior a toda la ardida durante el año"

"El 100% de los incendios fueron intencionados", ha asegurado la conselleira de Medio Rural, Angeles Vázquez, respecto a los fuegos que aún arden en Galicia. Desde el fin de semana se han contabilizado 216 incendios, de los que cuatro siguen activos aunque ninguno ya en nivel 2.

La conselleira de Medio Rural de la Xunta de Galicia, Angeles Vázquez, ha asegurado que "el 100% de los incendios" forestales registrados durante el pasado fin de semana "fueron intencionados" y también ha afirmado que la superficie quemada por los 276 fuegos de esta oleada "va a ser superior a toda la ardida durante el año". Así lo ha avanzado durante una comparecencia a petición propia en el pleno del Parlamento de Galicia, en la que, como en anteriores ocasiones, no ha cifrado el número de hectáreas calcinadas ni en lo que va de año ni en los últimos días. Eso sí, ha recordado que la temporada de verano acabó el 30 de septiembre con un terreno quemado un 44% inferior al que ardió en 2016 hasta esa fecha, y ha contabilizado esta diferencia en 9.000 hectáreas menos.

El balance del verano (de 1 julio a 30 septiembre), según ha añadido, dejó un número de incendios un 20% inferior al del mismo periodo de 2016, y con un 70% menos de superficie quemada, esto es, 6.000 hectáreas menos. En 2016, de acuerdo con los datos que analizó el Consello de la Xunta, la comunidad superó las 20.000 hectáreas quemadas (20.347), más de 9.000 de monte arbolado, hasta comienzos de noviembre.

Vázquez ha explicado que "de los 31 grandes incendios que se originaron, 16 prendieron entre las cinco y media de la tarde y la una de la madrugada. Un ataque masivo que se produjo en muy poco tiempo y que trajo el horror a gran parte de la comunidad, hasta el punto de que llegaron a estar activos hasta 125 fuegos al mismo tiempo", según el dato contabilizado a la tres de la madrugada del lunes.

El fuego ya no amenaza zonas habitadas en Galicia

Cuatro incendios siguen activos en Galicia, otros 25 están controlados y 15, estables, aunque ninguno representa riesgo para la población, según los últimos datos de la Xunta. Mientras, la Policía Nacional ha abierto a lo largo de la jornada una dirección de correo electrónico para que los ciudadanos aporten información de forma anónima sobre los incendios de este fin de semana en Vigo y Redondela para recabar pistas sobre los posibles responsables.

Una vez desactivadas todas las medidas preventivas por la proximidad del fuego a zonas pobladas y superados los momentos críticos -la llegada de las lluvias ha ayudado a los equipos de extinción-, el debate político sobre la gestión forestal en la comunidad autónoma se ha abierto paso tras las manifestaciones de protesta de este lunes en diversas ciudades gallegas. Acompañada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, la ministra de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha visitado varios enclaves afectados, al igual que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y el líder de Podemos, Pablo Iglesias.

Alberto Núñez Feijóo, que ha trasladado personalmente el pésame a las familias de los cuatro fallecidos, ha sostenido que ya ha pasado la "peor fase" y que ahora toca comenzar a evaluar las consecuencias, dando prioridad a la recuperación de las viviendas de quienes las han perdido. El titular de la Xunta ha manifestado que se trata de "un problema de atentados" y de "delincuentes homicidas", término empleado para referirse a los incendiarios, mientras que ha lamentado que las fuerzas de la oposición instrumentalizan políticamente la catástrofe.

Núñez Feijóo ha acompañado a la ministra García Tejerina en su visita al centro de coordinación de Santiago de Compostela y posteriormente a Oseira (Ourense), una zona muy castigada por las llamas y en la que se encuentra el monasterio del mismo nombre, que fue desalojado. La ministra ha pedido a la sociedad que sea "absolutamente intolerante" con los incendiarios y ha alabado la labor de los equipos de extinción, además de adelantar que el Gobierno habilitará ayudas para las zonas más afectadas.

Por su parte, en la aldea de Chandebrito, en el ayuntamiento de Nigrán, Pedro Sánchez ha informado de que, en su próxima reunión con el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, pedirá la activación del fondo de solidaridad europea para Galicia, Asturias y Castilla y León, las tres autonomías más afectadas por los incendios forestales. Del mismo modo, el secretario general socialista ha pedido "cautela" a la hora de demandar responsabilidades políticas y ha afirmado que en el PSOE serán "leales" y no repetirán el comportamiento del PP con motivo de la ola de incendios de 2006, cuando había en Galicia un gobierno bipartito de PSdeG y BNG.

Pablo Iglesias ha subrayado que "en política hay que asumir las responsabilidades" y ha instado a la Xunta a hacerlo con las suyas en materia de incendios forestales. El secretario general de Podemos ha denunciado también las condiciones de precariedad y falta de medios de las brigadas y bomberos forestales.

El panorama ahora es desolador y, por ejemplo, en la localidad lucense de Cervantes, en pleno corazón de Os Ancares, las llamas han consumido zonas de alto valor ecológico y natural, con castaños centenarios que han sido pasto de las llamas y han puesto en peligro hábitats de animales amenazados como el oso pardo o el urogallo.

Vecinos de la localidad orensana de Carballeda de Avía han descrito estos sucesos como "tormentas de fuego" que, en cuestión de horas, arrasaron montes cercanos y alguna vivienda, causando este lunes la muerte a un hombre que trataba de socorrer a su ganado. A este vecino se le daba este martes el último adiós en una iglesia rodeada de tierra quemada.

Destruido por completo ha quedado el aserradero de As Neves, donde trabajaban 24 empleados, y donde ahora se amontona maquinaria calcinada, cientos de troncos ennegrecidos y las cubiertas metálicas retorcidas por el calor.

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