Centenares de personas se han concentrado este mediodía en la madrileña Puerta del Sol para celebrar las 'pre-uvas', una tradición que se ha asentado en los últimos años y que consiste en un ensayo antes de las campanadas de medianoche con las que recibiremos 2015.
Como viene siendo habitual, ciudadanos de la capital y de otros puntos de España se han congregado en el kilómetro cero, bien sea en familia, con amigos o en pareja, para festejar esta tradición. Muchos de los protagonistas de este ensayo han sido niños que han acudido con sus padres para vivirlo en primera persona.
Es el caso de Angela, que ha acudido con familiares y amigos y han sustituido las tradicionales uvas por gominolas. Por otro lado, una familia al completo y disfrazada con originales gorros, se ha trasladado desde Móstoles, como viene siendo habitual, con el fin de "pasarlo bien todos juntos".
"Hay que pedir salud, trabajo, felicidad y amor para toda la gente", ha dicho Marisa, una de las jóvenes presentes en la Puerta del Sol y que ha celebrado la despedida del año con dulces, aunque los hay que preferían peladillas o conguitos. Tan solo la veterana del clan ha respetado la tradición y se ha tomado doce uvas.
Noelia y su madre, esta última disfrazada de Papá Noel, se han mostrado muy nerviosas diez minutos antes de las doce y han reconocido que al año nuevo le piden, sobre todo, salud. "Vamos a tomar lacasitos y brindaremos con agua", ha explicado la madre de Noelia, quien reconoce que estos ensayos permiten disfrutar del momento con los niños, ya que por la noches "es demasiado caótico", ha aseverado.
Provenientes de Pozuelo y de Getafe se encontraban unos amigos que han traído sidra para brindar en este encuentro que para ellos ya se ha convertido en una costumbre puesto que llevan nueve años acudiendo a esta cita. "Esto se ha masificado", ha reconocido uno de ellos.
La alegría se ha apoderado de todos los allí presentes después de que el reloj de la tradicional Puerta del Sol anunciara con sus doce campanadas que tan solo falta medio día para que llegue el nuevo año, aunque algunos ya lo han recibido por todo lo alto.
