Tráfico en una autovía

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EN LA A-52 EN OURENSE

Interceptan a un hombre de 80 años que circuló más de 30 kilómetros en sentido contrario

Las patrullas cercanas a la A-52, por donde circuló el varón de 80 años en sentido contrario, retiraron el vehículo de la autovía y se pusieron en contacto con un hijo del conductor para que se hiciera cargo tanto de su padre como del coche. La Guardia Civil señala que no se trata de un "kamikaze", sino que se trata de un "déficit de atención y desorientación del conductor".

El Subsector de Tráfico de Ourense ha interceptado a un vecino de Trasmiras (Ourense) de 80 años de edad tras circular más de 30 kilómetros en sentido contrario por la autovía A-52 en la provincia ourensana.

Según ha informado el Instituto Armado, sobre las 20,00 horas del 18 de febrero recibió un aviso del 112 Galicia de varias llamadas de conductores que iban por los carriles hacia Benavente de la A-52, a la altura de Riós (Ourense), que alertaban de la presencia de un turismo en sentido contrario.

Por ello, según explican las mismas fuentes, se activó el dispositivo de la Dirección General de Tráfico para estos casos, que consiste en el encendido de los paneles luminosos situados en los pórticos de las vías desdobladas con la leyenda 'Vehículo en sentido contrario. Extremen la precaución' y la "movilización urgente" de todas la patrullas en la zona.

Como resultado de la intervención conjunta de las patrullas de Tráfico y de Seguridad Ciudadana, a las 20,15 horas interceptaron y detuvieron la marcha de un Renault Megane en el kilómetro 172, a la altura de As Estivadas, "después de haber recorrido más de treinta kilómetros en sentido contrario", según subrayan las mismas fuentes.

Después de identificar al conductor, éste resulto un varón de 80 años, de iniciales S.B.C., vecino de Trasmiras, el cual señaló a los agentes que intervenían "de que estaba convencido que era él el que circulaba correctamente".

Ante esta situación los agentes decidieron retirar el vehículo de la autovía y trasladarlo hasta la explanada de un restaurante próximo, y, desde allí, se pusieron en contacto con un hijo del conductor, para que se desplazase hasta ese lugar para hacerse cargo tanto de su padre como del vehículo.

"Déficit de atención"

La Guardia Civil de Ourense ha puntualizado que esta incidencia "no puede calificarse como kamikaze", puesto que la entrada y la posterior circulación en sentido contrario "obedecieron más a un déficit de atención y desorientación del conductor que a una actitud consciente y deliberada", según ha abundado.

Por estos hechos se ha formulado la correspondiente denuncia administrativa y se ha propuesto a esta persona para un reconocimiento psicotécnico extraordinario "por una posible pérdida de las aptitudes psicofísicas que son requeridas para la conducción de vehículos a motor", según ha concretado la Benemérita.

Con todo, el Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ourense hace un llamamiento para que "todas aquellas personas que tengan conocimiento o desconfíen de que algún familiar suyo haya podido haber perdido las facultades para la conducción, informen oportunamente a las autoridades de tráfico".

De este modo, según subraya, "se podrá evitar situaciones como la descrita, con el consiguiente peligro tanto para el propio conductor como para los demás usuarios que circulan por las vías públicas".

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