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LALÍN (PONTEVEDRA)

La Guardia Civil difunde las imágenes de la liberación del empresario secuestrado

Confuso, desorientado y temblando de frío, así encontró la Guardia Civil al empresario gallego que permaneció secuestrado cinco días en un cobertizo de Lalín, en Pontevedra. El empresario estaba desorientado y no era consciente de dónde se encontraba.

“Tranquilo, somos de la Guardia Civil, hemos venido a sacarte”. Ésas eran las palabras de los agentes en el momento de la liberación del empresario. Se ponía fin así a cinco días de cautiverio, malos tratos y amenazas de muerte, que el empresario Abel Diéguez, de 41 años había tenido que sufrir.

Diéguez, que ha sido rescatado por los miembros de la Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil preguntaba cuando se ha puesto fin a su secuestro “¿Dónde estoy”. Desorientado, el empreario deconocía el lugar en el que había estado retenido durante cinco días.

Los miembros de la Guardia Civil han identificado a Jesús Mejuto como supuesto cabecilla de los secuestradores al ser grabado dejando una carta manuscrita del empresario en casa de la familia de la víctima, detallando las amenazas y exigencias. Mejuto tiene antecedentes por extorsiones y complicidad en un homicidio en México, por lo que se cree que pudo especializarse allí en los secuestros.

Entre los detenidos llama la atención un matrimonio cercano a los setenta años y sin antecedentes y que son los propietarios de la vivienda donde estuvo retenida la víctima, en Lalín, Pontevedra. Su nexo con los captores es su hija, pareja sentimental del presunto cabecilla.

El juez ha mandado a todos ellos a prisión sin posibilidad de salir bajo fianza.

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