Publicidad

GALICIA | MÁS DE 17 INCENDIOS EN 7 DÍAS

Declarado el máximo nivel de alerta en Oia por un incendio que amenaza viviendas

El viento está complicando las tareas de extinción del incendio de Oia (Pontevedra), en el que ya han ardido unas mil hectáreas y casi unas doscientas personas han sido desalojadas.

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y la conselleira de Medio Rural y del Mar, Rosa Quintana, han coincidido en destacar la dificultad de extinguir el incendio a causa del viento y han subrayado que la prioridad ha sido proteger a las personas y las casas.Rueda ha agradecido el trabajo de todo el dispositivo formado por medios locales, autonómicos y estatales, así como la colaboración de los vecinos y ha advertido que continúan las investigaciones para determinar si los incendios son intencionados, en cuyo caso se perseguirá a sus autores.

La conselleira, que ha estado toda la noche en el lugar del incendio siguiendo su evolución, ha apuntado que el fuego se inició en un solo punto y que, por causa del viento, hubo muchos focos secundarios. En cuanto a la posible intencionalidad, ha dicho que lo que más le preocupa al Gobierno gallego es salvar todos los núcleos de población y después controlar el incendio.

En cualquier caso ha dicho que es "poco partícipe a creer en casualidades" y ha señalado que el incendio comenzó a última hora de la tarde, cuando había un fuerte viento y en una zona de pendiente hacia los núcleos de población. Ha dicho que vivió "con mucha tensión" la noche porque la situación fue "muy complicada" y ha insistido en el trabajo de todos los medios disponibles, así como de los propios vecinos, que colaboraron con "mangueras y cubos".

Quintana ha dicho que los técnicos le han comentado que "que nunca vieron un fuego igual" ya que las corrientes de aire hacían variar constantemente la dirección del fuego y modificaban las estrategias para atacarlo.

En cuanto a las personas desalojadas ha dicho que se debió al humo, principalmente, y ha señalado que el fuego "se veía muy cerca" de las casas aunque ninguna llegó a arder.

Ha afirmado que la situación en los núcleos de población está "controlada" y ha aventurado que queda un "día muy duro por delante".En cuanto a las hectáreas quemadas, ha explicado que de momento son mil, aunque ha insistido en que son provisionales porque "por la noche esto era un caos", y cuando se puede ofrecer una cifra más exacta se dará, aunque "todo apunta a que superará las mil hectáreas".

La provincia de Ourense ha registrado más de 17 incendios en 7 días, el peor fue el de Culebro, llegando a cruzar la frontera con Portugal.

Publicidad