La residencia geriátrica 'Ribera del Sió' de Agramunt (Lleida), donde esta madrugada han fallecido cuatro ancianas sorprendidas por una riada que ha inundado sus habitaciones, superó satisfactoriamente la última inspección de la Generalitat en mayo de 2014 con todas sus instalaciones en regla.
Según han informado fuentes del Departamento de Bienestar Social y Familia de la Generalitat, la inspección no detectó ninguna anomalía en el funcionamiento de la residencia, que tenía la ratio de personal correcta y todas las instalaciones adecuadas.
Se trata de una residencia geriátrica privada gestionada por una empresa familiar que se registró en abril de 2005 y fue acreditada por la Generalitat en diciembre de ese mismo año. Con una capacidad para 67 ancianos, la residencia cuenta con 46 plazas colaboradoras, es decir, plazas públicas que paga la Generalitat, y tres acreditadas para recibir la prestación económica vinculada, la que paga la administración hasta que pueda ofrecer una plaza pública.
En su página web, la residencia, situada en el número 12 de la calle Horts de Agramunt, se anuncia como una "residencia asistida que atiende a personas con dependencias físicas que precisan atención especializada, con unidad de demencias para personas con patologías neurológicas degenerativas, fundamentalmente enfermedad de Alzheimer". La residencia también ofrece habitaciones de corta estancia para "descansos familiares, convalecencias, recuperación de enfermedades agudas o fracturas, fines de semana u otras causas".
Del total de 67 plazas del geriátrico, 58 son plazas de residencia asistida, repartidas en habitaciones individuales o dobles, la mayoría con baño en la habitación y cuenta con una unidad de deterioro cognitivo, con 9 plazas, con habitaciones individuales o dobles, sala de estar-comedor y baños propios.
El geriátrico es muy conocido en Agramunt, una localidad de 5.500 habitantes situada en el centro de un valle entre la Sierra de Almera y la del Montclar, en la comarca del Urgell, por el que discurre el río Sió, que esta madrugada se ha desbordado tras unos intensos aguaceros que han descargado más de 100 litros por metro cuadrado en la comarca vecina de la Segarra, que ha hecho bajar una riada por el cauce.
