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UN PROBLEMA QUE SE REPITE POR VARIAS CIUDADES

La burbuja turística provoca precios prohibitivos en los alquileres

Comienza las vacaciones de verano y con ella llegan los turistas, bien sabe de ello Barcelona, que cada año recibe cinco veces más personas de las que viven en ella.

El aumento del turismo no siempre es positivo. El alquiler de pisos para turistas se ha disparado por lo que muchos ciudadanos puedan acceder porque los precios son cada vez más prohibitivos.

El problema se repite en varias ciudades españoles, entre ellas Barcelona, que recibe cada año a 30 millones de visitantes, una cifra que hace que se dispare hasta un 50% el precio del alquiler o que la mitad de las viviendas disponibles sean precisamente para uso turístico.

Muchos vecinos se quejan de que no pueden comprar ni pasear con tranquilidad. Aunque no para todos es negativo, los comerciantes aumentan su caja un 40% en el centro de la ciudad.

A partir de este viernes, un autobús recorre las principales calles de Barcelona para reflejar la relación amor-odio que los ciudadanos barceloneses sienten hacia el turismo.

Una ciudad que cada año recibe cinco veces más personas de las que viven en ella. Eso genera problemas. Un turista consume el triple de agua que un residente, cada crucero contamina lo mismo que 80.00 coches.

La cruz y la cara en unos datos que favorecen a muchos sectores. El turismo supone el 14% del PIB de la ciudad condal, casi el 20% que ganan los comercios es gracias a los turistas.

Aunque los problemas más evidentes se encuentran a la hora de buscar un alquiler, una cifra que se ha disparado un 40%. Como es el caso del barrio de Raval, donde alquilan un piso ilegalmente para 14 personas con unas dimensiones de 60 metros cuadrados.

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