Niños en clase

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CONOCIDAS TAMBIÉN COMO 'HEELYS'

Los podólogos piden a los colegios que prohíban las zapatillas con ruedas

El Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos ha pedido a los centros educativos de infantil y primaria que no permitan que los niños vayan a los centros con este tipo de calzado ante los problemas que ocasionan su uso. Este tipo de zapatillas aumenta la carga en el antepié y la presión media sobre el talón.

El Consejo General de Colegios Oficiales de Podólogos ha recomendado a los centros escolares que prohiban la utilización de zapatillas con ruedas a los niños. Esta institución ha lanzado esta recomendación tras un estudio de la Universidad Miguel de Cervantes de Elche que ha analizado el impacto para el pie de este tipo de calzados.

Conocidas también como 'heelys', estas zapatillas aumentan la carga en el antepié y la presión media sobre el talón. Un 11% de los alumnos van al colegio en alguna ocasión con este calzado. Esto hace que los menores pasen con estas zapatillas más de ocho horas diarias en muchos casos cuando para Roberto Pascual, autor del estudio, "no son un calzado sino un juguete" y no deberían usarse "más de una o dos horas a la semana".

En su estudio analizaron una muestra de 100 niños de 2,5 y 8,5 años y vieron que a largo plazo puede ocasionar problemas derivados de su peso, de la altura del tacón, de la falta de flexibilidad y del propio 'ruedín' y su inestabilidad.

El elemento más crítico es la altura de tacón ya que la diferencia en algunos modelos de una zapatilla con rueda o sin rueda puede ser de hasta cinco centímetros.

Los estudios científicos demuestran que cuando un individuo está descalzo en el suelo el 75 % del peso lo soporta el talón y el 25 % el antepié. Pero a medida que la altura de tacón aumenta, los porcentajes varían, y con un tacón de cuatro centímetros el talón ya sólo soporta el 50% del peso y la otra mitad el antepié.

Esto puede tener consecuencias en problemas de crecimiento, enfermedad de Freiberg o metatarsalgias, así como el posible acortamiento a largo plazo de la cadena muscular posterior y su relación con las talalgias, como la enfermedad de Sever y el desarrollo de pies planos que no evolucionan de forma fisiológica a partir de los ocho años.

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