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LAS GAFAS DE SOL Y ACUÁTICAS SON IMPRESCINDIBLES

Los problemas oculares se multiplican en verano

Conjuntivitis, irritaciones o sequedad son solo algunos de lo problemas oculares que se multiplican en esta época del año. En verano los ojos sufren más de lo habitual por el sol y el cloro.

Del mismo modo que nos ponemos crema en la piel para no quemarnos, es importante el cuidado de los ojos en los meses de verano, ya que sufren más de lo habitual por el sol y el cloro. Los consejos más importantes : que no falten las gafas de sol ni las acuáticas.

Las gafas de agua tienen que ser homologadas y, al terminar, para evitar conjuntivitis o infecciones, conviene lavarse los ojos con suero fisiológico; de esta manera quitamos restos de cloro o de agua marina. También se debe tener en cuenta que cada media hora hay que quitárselas y dejar que se oxigenen los ojos.

Sin embargo, la mejor opción son las gafas polarizadas. Podemos comprobar que lo son si juntamos dos lentes, giramos, y la imagen desaparece y va a negro. Hay también filtros que además de resaltar los colores cuidan más el ojo.

En cuanto a los más pequeños, también hay que protegerlos de las radiaciones. Por ello aconsejan, sobre todo para los bebés, molduras de silicona que se adaptan mejor a su cara.

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