Renuncia a un tratamiento de quimioterapia para poder dar a luz a su bebé

Una mujer californiana ha sacrificado su vida por la del bebé que llevaba en su vientre al enterarse de que sufría cáncer de huesos y no interrumpir el embarazo para someterse a quimioterapia. 

Cuando llevaba 10 semanas de embarazo a Ashley Bridges le diagnosticaron un cáncer de huesos. Los médicos le informaron que, para someterla al tratamiento de quimioterapia que necesitaba iniciar de forma inmediata, debía interrumpir su embarazo. Sin embargo, ella se negó.

“No concebía la idea de matar a un bebé solo porque yo esté enferma”, ha declarado la joven a la cadena CBS. Cuando el embarazo alcanzó el octavo mes, los médicos, tras examinar a Bridges, le informaron que, al no haberse sometido aún a la quimioterapia, el cáncer había avanzado y que ella dificilmente iba a poder salvar la vida.

La joven dio a luz a Paisley, una niña que nació en perfecto estado de salud. Fue entonces cuando Bridges comenzó su tratamiento de quimioterapia, aunque los médicos señalan que es posible que no le quede más de un año de vida.