El presidente estadounidense, Barack Obama

Publicidad

ACUERDO NUCLEAR CON IRÁN

Obama: "Un rechazo del Congreso al acuerdo nuclear significaría guerra"

El presidente de EEUU, Barack Obama, anticipó que el rechazo del Congreso de su país al acuerdo nuclear con Irán dejaría, como única opción posible, iniciar "otra guerra en Oriente Medio". Obama defendió la importancia del pacto nuclear entre el Grupo 5+1 e Irán firmado el mes pasado.

El presidente de EEUU, Barack Obama, subrayó este miércoles que el debate en el Congreso del país sobre el acuerdo nuclear con Irán es el más importante sobre una cuestión de política exterior desde la autorización de la guerra de Irak en 2002.

En una alocución en la American University de Washington, Obama enfatizó que los mismos legisladores que votaron en su día a favor de esa guerra se oponen ahora al acuerdo con Irán, y sostuvo que están "equivocados" al pensar que ha sido un "error histórico" pactar con Irán.

El presidente recalcó que, más de una década después del inicio de la guerra de Irak, los estadounidenses sufren aún las "consecuencias" de la decisión de llevar a cabo la invasión de ese país, que, a su juicio, benefició únicamente a Irán. "El pacto con Irán es el acuerdo de no proliferación más sólido jamás negociado", destacó Obama ante una audiencia de más de 200 personas.

Además, el gobernante dijo que en el mundo "todos los países, con excepción de Israel", han expresado su apoyo al acuerdo alcanzado en julio en Viena entre Irán y el Grupo 5+1 (China, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Rusia más Alemania).

Obama dijo también que el acuerdo garantiza que Irán no tendrá acceso al plutonio necesario para fabricar una bomba nuclear. Al inicio de su discurso, Obama evocó al asesinado presidente John F. Kennedy y su llamamiento a una "paz práctica" en 1963, en plena Guerra Fría, para evitar una guerra nuclear.

Fue en la American University donde Kennedy pronunció un destacado discurso en junio de 1963 sobre la necesidad de la diplomacia y en defensa del tratado de desarme nuclear firmado poco después. Para entrar en vigor, el acuerdo alcanzado en Viena el 14 de julio debe ser aprobado en EEUU por el Congreso, así como por demás países firmantes.

Los legisladores solo podrían anular la participación de EEUU en el acuerdo si una mayoría de dos tercios de ambas cámaras del Congreso vota en ese sentido, algo que invalidaría el veto que Obama ha prometido imponer a cualquier decisión en contra. Obama se ha involucrado de manera muy personal y dedicado tiempo y esfuerzo a una campaña para tratar de convencer de la bondad del acuerdo a los congresistas.

Dado el rechazo mayoritario de los republicanos al acuerdo, Obama centra sus esfuerzos en convencer a los congresistas de su partido, el Demócrata, para intentar evitar que haya dos tercios de votos contrarios al pacto.

El pacto firmado en julio prevé que Teherán limite su programa nuclear de forma que no pueda fabricar armas atómicas durante al menos diez años, a cambio de que la comunidad internacional levante las sanciones que lastran su economía.

Para ello, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) debe certificar hasta finales del año que la República Islámica cumple con los compromisos adquiridos y ha acordado con Teherán un calendario de actividades de verificación.

Publicidad