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LA POLICÍA HA ABATIDO A DOS ASALTANTES

Al menos 23 muertos tras un asalto al Parlamento de Túnez

Un ataque terrorista contra el Parlamento de Túnez se ha cobrado la vida de 18 turistas extranjeros, además de un policía, un chófer de autobús y una limpiadora del museo y dos terroristas. Hay dos víctimas mortales de nacionalidad española; el resto son de procedencia polaca, italiana, sudafricana, japonesa, colombiana, brasileña y alemana. Los milicianos han liberado a más de cien rehenes que se encontraban retenidos en el cercano Museo del Bardo, dentro del mismo complejo.

Un total de 23 personas murieron y otras 47 resultaron heridas en el ataque terrorista perpetrado por un grupo yihadista en el centro de Túnez, según el balance de víctimas hecho público por el ministro tunecino de Salud, Said Saidi. El ministro indicó que de las 23 personas muertas, 18 eran turistas extranjeros, a los que hay que sumar un policía, un chófer de autobús, una limpiadora del museo y  dos terroristas. Los heridos fueron cifrados en 47 personas, entre turistas extranjeros y tunecinos, que aún se encuentran siendo atendidos en diferentes hospitales de la ciudad, dijo el ministro.

Entre los muertos se encuentran dos españoles -una pareja de jubilados catalanes -, dos ciudadanos colombianos -la esposa y un hijo del general retirado José Arturo Camelo Piñeros- y un brasileño, que formaban parte de un grupo de turistas que realizaban un crucero por el Mediterráneo y que habían hecho escala en Túnez. También ha sido confirmada la muerte de tres italianos y las autoridades tunecinas informaron de que entre los fallecidos hay ciudadanos de Polonia, Alemania, Japón y Sudáfrica. Las autoridades tunecinas informaron también de que dos de los asaltantes fueron abatidos. Las fuerzas de seguridad investigan además si otras dos personas, vistas en el lugar del ataque, pueden estar implicadas.

Lugar donde se ha producido el atentado

Munira Brahmi, diputada del partido islamista Al Nahda que se encontraba en el Parlamento durante el ataque, explicó que al menos cuatro hombres armados entraron en el Museo a media mañana con un grupo de rehenes. Momentos antes, un joven de unos 22 años y vestido a la manera occidental había abierto fuego contra un grupo de unos 40 turistas que se disponían a entrar en el Museo del Bardo, el más importante de Túnez, situado junto al parlamento. En el grupo atacado había "4  brasileños, 4 argentinos, 4 colombianos, 10  mexicanos y el resto, 28, eran españoles, cuyo crucero hizo hoy escala en el puerto de La Goleta, a 17 kilómetros del centro de la capital", según dijo su guía Wasel Busid.

Un fotógrafo que se encontraba en el jardín del museo tras el ataque al autobús dijo que al menos cuatro hombres armados corrieron por los jardines, donde se refugiaron tras no haber podido penetrar en los edificios del Parlamento. Se cree que todo comenzó como un intento de asalto a la Asamblea que fue frustrado. La fuente añadió que presenció cómo los terroristas eran abatidos finalmente a las 15.00 horas local en una operación policial que se saldó con la muerte de quince personas.

Fuentes de los servicios de seguridad de Túnez identificaron a dos de los terroristas muertos durante el asalto como Yaber Jachnawi, originario de la región de Kaserín, en el suroeste, y Yasín Labidi, del barrio capitalino Ibn Jaldún. El padre de Jachnawi reconoció que su hijo, al que consideraba desaparecido, le había telefoneado desde Irak hace tres meses donde se había sumado al movimiento radical Estado Islámico (EI).

El jefe de Estado tunecino, Beyi Caid Essebis, calificó el atentado de " gran catástrofe y aseguró: "no tengo más comentarios", en declaraciones a los medios. Los españoles que se vieron involucrados en el intento de asalto al Parlamento de Túnez y al Museo del Bardo y que salieron ilesos se encuentran ya en su barco, en el que realizaban un crucero por el Mediterráneo, confirmaron fuentes diplomáticas. Esos españoles formaban parte de un grupo de cuarenta hispanohablantes que realizaban el crucero. En el citado grupo había además, diez mexicanos, cuatro argentinos, cuatro colombianos y cuatro brasileños, explicó el guía del grupo, Wasel Busid.

Fuentes sanitarias dijeron que se intenta confirmar si dos de los muertos que todavía no han sido identificados podrían ser españoles. Túnez, uno de los países de los que proceden yihadistas que se han sumado al Estado Islámico en Irak y Siria, combate desde hace semanas a grupos terroristas de la región de Kasserin, una zona montañosa cerrada militarmente donde se atrincheran radicales provenientes de todos los países del Sahel, vinculados con la Organización Al Qaida en el Magreb, Ansar al Saharia y el propio Estado Islámico.

Desde que hace un mes se formara el primer gobierno posterior a la transición iniciada con la primavera árabe, las fuerzas tunecinas han detenido a decenas de supuestos yihadistas y han expresado el temor a un atentado que destruya el turismo, sobre el que se basa gran parte de su futuro económico.  El ministro tunecino de Asuntos Exteriores, Taieb Baccouche, pidió hoy a los turistas que no dejen de visitar su país, pese al atentado. Según el ministro, el ataque de hoy "no tiene que disuadir a los amigos que quieran visitar Túnez" en verano o en cualquier otra estación, sino que "al contrario debe incitarlos a apoyar a Túnez en su lucha contra el terrorismo". "Los terroristas deben entender que el terrorismo no tiene futuro" y para eso "hay que vivir" con normalidad, agregó.

Túnez ha sido escenario en las últimas semanas de un repunte de la actividad yihadista en la región de Kasserine, en la frontera oeste con Argelia, zona montañosa que utilizan como bastión radicales locales y también grupos procedentes del país vecino y otros estados de la zona como Mali, Marruecos o Mauritania. Desde 2012, decenas de guardias nacionales tunecinos han muerto o han resultado heridos en combates o causa de atentados y emboscadas islamistas en Mont Chambi, escenario el pasado julio del peor ataque islamista sufrido por las fuerzas tunecinas, que causó 15 muertos.

A mediados de febrero, cuatro agentes de la Guardia Nacional de Túnez murieron en un ataque de presuntos yihadistas en la región de Kaserine, considerada uno de los feudos de células islamistas radicales afines al grupo Al Qaeda en el Magreb Islamico (AQMI) y a la rama norteafricana del Estado Islámico (EI).

Célula de crisis en Túnez

El Gobierno de Túnez ha convocado una célula de crisis encargada del seguimiento del ataque, según ha informado el portal de noticias Businessnews.com.tn. La célula de crisis se ha convocado de urgencia para evaluar la situación tras el ataque contra el centro cultural, en el que los terroristas mantienen secuestradas varias decenas de personas. La célula de crisis está presidida por el primer ministro tunecino, Habib Essid. El Estado, Béji Caïd Essebsi, está siguiendo los acontecimientos y que tiene previsto dirigir un discurso a la nación en las próximas horas.

Un precario sistema educativo, unido al alto índice de paro y la falta de esperanzas en una sociedad atrapada por la crisis económica han hecho, además, que las tesis de los radicales islámicos hayan comenzado a calar en una nación conocida tradicionalmente por su modernidad y laicismo. En la actualidad, Túnez es uno de los países que más nacionales aporta a las filas del EI, con más de 300 tunecinos emigrados a Siria e Irak para unirse a la lucha de Abu Bakr al Bagdadi.

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