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EN CAMBERRA

Cómo la muerte de este niño australiano salva la vida de varias personas

Riley Moon, de 10 años, decidió coger su scooter para pasar la noche del viernes en casa de su amigo. Sin embargo, un repentino accidente le hizo chocar con un vehículo provocándole la muerte a causa de un traumatismo craneal severo. Tras el diagnóstico del médico, sus padres decidieron tomar una decisión muy personal, pero que les ayudaría a lidiar con la pérdida de su hijo.

Tras la pérdida de Riley, los padres decidieron hacer lo que su pequeño y generoso hijo hubiera querido. Con eso, quisieron que la muerte de Riley sirviera para algo útil. Un acto de generosidad por el cual varias personas se sentirán eternamente agradecidos al pequeño.

"Nos da esperanza saber que nuestro hermoso hijo vive a través de las vidas de los demás", señala la madre.

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