Camerún prohíbe el burka en el norte del país para evitar más atentados

Las autoridades camerunesas han decido prohibir el uso del velo en la región Extremo Norte del país y en el departamento de Noun, de mayoría musulmana, para evitar más ataques terroristas como el perpetrado el pasado domingo por Boko Haram en Fotokol y que costó la vida de al menos 16 personas.

Entre las medidas aprobadas, destaca también "el refuerzo de la seguridad, el control sistemático de vehículos y equipajes, la prohibición de la circulación de motos por la noche y el uso de coches con los cristales tintados", anunció el gobernador de la provincia del Extremo Norte, Midjiyawa Bakary.

Por su parte, el prefecto del departamento de Noun, Donatien Bonyomo, aseguró que "las personas que no puedan ser identificadas a simple vista tienen prohibido andar por la calle, coger cualquier medio de transporte público o acudir a lugares muy concurridos tales como mercados, estaciones de autobuses, funerales u hospitales".

Se trata de una medida muy parecida a la que tomó Chad después de que el pasado 15 de junio dos terroristas de Boko Haram vestidos con burka se inmolaran en una comisaría y una academia de Policía de Yamena y mataran al menos 34 personas, si bien la medida no ha evitado que haya habido más atentados.

El presidente del Consejo de los Imames y Dignatarios Musulmanes de Camerún (CIDIMUC), Moussa Oumarou, aseguró que este tipo de medidas son "normales" y que, cuando hay problemas de inseguridad, "el Estado tiene el derecho de garantizar el bienestar de la población" con los medios que crea convenientes.

En la misma línea se expresó el politólogo camerunés Guy Parfait Songuè, que considera que la prohibición del burka puede plantear un "problema cultural", pero desde el punto de vista operativo es una medida "necesaria" porque Camerún se encuentra en estado de guerra contra el grupo islamista.

El ataque del pasado 12 julio fue el primer atentado suicida perpetrado por Boko Haram en territorio camerunés, si bien el grupo ya había cometido algunas matanzas, siempre en la región Extremo Norte, que limita con Nigeria al oeste y Chad al este.

Un día antes, dos terroristas se inmolaron en un mercado de Yamena y causaron al menos 16 muertos en el segundo atentado suicida en Chad, cuyo Ejército ha jugado un papel clave en la campaña regional para recuperar gran parte del territorio que estaba bajo control de Boko Haram.