Kim Jong-nam, el hermano de Kim Jong-un

Publicidad

PERFIL DEL HERMANO ASESINADO DEL LÍDER NORCOREANO

Así era el hermano de Kim Jong-un, un intelectual educado al que le gustaba viajar y con cuenta de Facebook

Kim Jong-nam pasó nueve años en un colegio internacional en Suiza, tiempo durante el cual tuvo la oportunidad de viajar y aprender idiomas. Esa experiencia le hizo empezar a cuestionar la manera en la que su padre dirigía el país, así como el sistema económico del régimen comunista.

Kim Jong-nam, el hermano del líder norcoreano Kim Jong-un presuntamente asesinado en Malasia, era un hombre "intelectual" y "educado" que dominaba varios idiomas y que parecía no temer por su vida, como demuestra la cuenta pública que tenía en Facebook. "Había rumores de que era un vividor al que le gustaba el juego. Mi percepción era diferente. Para mí era muy intelectual y muy educado", explica el periodista nipón Yoji Gomi, quien mantuvo durante años una correspondencia con el miembro de la dinastía Kim.

Autor del libro 'Mi padre Kim Jong-il y yo' (2012), Gomi reconoce que estaba "sorprendido" y "apenado" por la muerte del que llegó a considerar su amigo. Kim Jong-nam, de 45 años, falleció el lunes después de que dos mujeres le abordaran en el aeropuerto de Kuala Lumpur y supuestamente rociaran la cara de la víctima con un veneno. Los forenses realizaron el miércoles la autopsia del cadáver, pero aún no se han revelado la causa de la muerte y todo alrededor del caso sigue siendo un misterio.

Fruto de la relación entre el dictador y la que fue su primera concubina, la actriz Song Hye-rim, Kim Jong-nam vivía autoexiliado entre Macau y Pekín sin prácticamente ninguna exposición pública, a parte de las críticas hacia el régimen norcoreano y su sistema de sucesión que el periodista recogió a través de su correspondencia. Kim Jong-nam pasó nueve años en un colegio internacional en Suiza, tiempo durante el cual tuvo la oportunidad de viajar y de "ampliar su perspectiva": hablaba coreano, francés, inglés, ruso, algo de chino y japonés.

Esta experiencia le hizo empezar a cuestionar la manera en la que su padre dirigía el país e incluso el sistema económico del régimen comunista, algo que lo llevaron a distanciarse del dictador, quien finalmente señalaría a su tercer hijo, Kim Jong-un, como su sucesor. Gomi afirmó en un encuentro con un grupo de periodistas en Tokio que Kim Jong-nam creía que "el poder no debía ser hereditario", sino que "el líder debía ser elegido en un proceso democrático", y que la única forma de supervivencia de Corea del Norte sería "a través de políticas de liberalización, como había hecho China".

Dos encuentros entre el periodista y Kim, primero en Macao y luego en Pekín, siete horas de entrevistas cara a cara y más de 150 correos electrónicos intercambiados forjaron la relación entre ambos; sin embargo, la correspondencia cesó en enero de 2012, poco después la muerte de Kim Jong-il. Tras la publicación de un artículo con declaraciones de Kim en un periódico nipón, este aseguró a Gomi que había recibido "una advertencia" por parte de Corea del Norte y que no hablaría más sobre política con él.

Durante su encuentro en Pekín, recuerda Gomi, Kim estaba sudando y se revolvía en su asiento, pero en su última correspondencia no mostró signos que hicieran sospechar que este temía por su vida. "Aunque era peligroso para él, probablemente quería mandar un mensaje a Pyongyang", afirma el periodista. Por otro lado, Gomi considera que China -que ofrecía protección oficial a Kim- está "perpleja" por el asesinato, y por eso no se ha pronunciado. Además, cree que el asesinato causará un distanciamiento aún mayor entre China y Corea del Norte y "provocará un deterioro en sus relaciones".

El periodista reconoce que Kim nunca fue muy claro en cuanto a su profesión: "cuando le preguntaba a qué se dedicaba, decía que tenía un trabajo en el sector de inversiones, sin ofrecer más detalles". No obstante, el hermano del líder norcoreano -al que afirmó no haber conocido nunca en persona- parecía llevar una vida abierta: vivía en Macao, viajaba con frecuencia a China y el sudeste asiático, y publicaba fotos de sus viajes en su perfil público de Facebook, ahora bloqueado.

En la lista de amigos de su perfil, creado bajo el nombre de Kim Chol -mismo nombre que aparecía en el pasaporte falso con el que entró en Malasia-, aparecían personas de Singapur, Francia o Suiza.

Publicidad