Las autoridades nicaragüenses han declarado la alerta amarilla en la provincia occidental de Chinandega y la alerta verde o preventiva en la provincia de León debido a la posibilidad de una violenta erupción del volcán San Cristóbal.
La primera dama nicaragüense, Rosario Murillo, informó que las nubes que emana el volcán San Cristóbal, en el oeste de Nicaragua, que ha registrado tres explosiones con emanación de gases y cenizas, tiene en este momento una altura de 5.000 metros.
Murillo, también coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía del Gobierno sandinista, alertó, además, que cerca a la zona del volcán llueve, lo que combinado a los gases y cenizas "puede convertirse en lluvia ácida que afecten gravemente la salud de los pobladores que habitan en la falda del volcán".
Según Murillo, un observatorio de volcanes con sede en Washington advirtió a las autoridades nicaragüenses sobre la altura que están alcanzado las nubes que emana el volcán San Cristóbal, por lo que decidieron declarar las alertas.
Existe "una situación de riesgo para las familias de esos departamentos (provincias)", que calculó en unas 20.000, apuntó. El director ejecutivo del Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter), Javier Mejía, dijo a periodistas que las cenizas cayeron en cinco comunidades ubicadas al norte del volcán.
Por su lado, el secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Prevención, Atención y Mitigación de Desastres (Sinapred), Guillermo González, anunció que evacuarán a 500 familias con unas 6.000 personas que habitan en las zonas aledañas al coloso, y que otros cientos ya han salido del lugar por sus propios medios. "No tenemos hasta el momento daños personales, ni daños materiales", aclaró.
