Accidente de avión en Taiwán

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APAGARON EL MOTOR OPERATIVO

El accidente de avión de febrero en Taiwan fue causado por error de los pilotos

El informe del Consejo de Seguridad Aérea de Taiwán determina que el accidente del vuelo GE235 de TransAsia se produjo por un error humano. Al poco de despegar, uno de los motores falló, y los pilotos, por confusión, desconectaron el motor operativo provocando que la aeronave cayese en picado.

El accidente del vuelo de TransAsia Airways del pasado 4 de febrero se debió a que los pilotos, tras sufrir una avería en uno de los dos motores, apagaron por error el motor operativo, señaló hoy un informe del Consejo de Seguridad Aérea de la isla.

Lo más llamativo, es que el mal estado y funcionamiento del segundo motor del avión ATR72-600 fue detectado por los pilotos durante el rodaje previo al despegue, según la grabación de cabina, dijo el director del consejo, Thomas Wang, en una rueda de prensa en Taipei. "El vuelo no debería haber despegado", afirmó Wang.

Durante el vuelo, al producirse anomalías en el funcionamiento del motor, la grabación de cabina muestra que los pilotos, por error, desconectaron el propulsor funcional. El organismo ha indicado que las cajas negras muestran que, tres minutos después del despegue, el capitán dijo: "¡Oh! He retirado el acelerador del lado equivocado".

Pocos segundos después el vuelo GE235 de TransAsia se estrelló después de despegar desde el Aeropuerto Songshan, en Taipei, con destino a la isla de Kinmen.

Al perder potencia, el avión se desvió de su curso: voló entre los edificios altos en Taipei, tocó un paso elevado, en donde arrolló un taxi, y se precipitó sobre el río Keelung. En el accidente murieron 43 personas.

En la aeronave, un avión comercial propulsado por dos motores turbohélice, viajaban un total de 53 pasajeros -de los cuales 31 eran turistas chinos- y cinco miembros de la tripulación. Un modelo similar de la misma compañía se estrelló en julio del año pasado cuando intentaba aterrizar en las islas de Penghu. Murieron 48 de los 58 pasajeros y tripulantes que viajaban a bordo, aunque el accidente más mortífero registrado en la zona de la isla este siglo se produjo en 2002, cuando la desintegración de un Boeing 747 de China Airlines dejó 225 fallecidos.




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