Este lunes, el tribunal debe fijar la fecha en la que se celebrará la vistilla. En ese encuentro, decidirán que medidas cautelares se toman sobre Iñaki Urdangarin.
Aún no se sabe si el fiscal solicitará la prisión preventiva inmediata, algo que suele ser habitual cuando las condenas superan los cinco años.
En cualquier modo, es el juez quien decide sobre esa prisión preventiva y, en caso de no aceptarla, podría aplicar otras medidas cautelares como la retirada del pasaporte o la periodicidad de firma en su comisaría más cercana.
Esta decisión deberá aplicarse hasta que haya una sentencia firme, que dependerá de si alguno de los condenados decide recurrir ante el Supremo. Si lo hicieran, se prevé que el fallo de este Tribunal, y por tanto definitivo, tarde un año.