Artur Mas, a su llegada a la Generalitat

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EL PRESIDENT ANALIZA LA SITUACIÓN DE CATALUÑA

Mas inicia el debate de política general marcado por el posible adelanto electoral

Todos las miradas están puestas en el presidente de la Generalitat. Los grupos parlamentarios acuden a la cita con la expectativa de un posible anuncio de elecciones anticipadas después de que Rajoy se negase a negociar el pacto fiscal. Se barajan los días 18 y 25 de noviembre o el 2 de diciembre como posibles fechas electorales.

Día clave para el futuro de Cataluña. Tras el rechazo de Rajoy a negociar el pacto fiscal en su cita el pasado jueves en Moncloa, Artur Mas tiene en su mano la posibilidad de convocar elecciones anticipadas.

Hoy se celebra en el Parlamento de Cataluña el debate de política general y todos los grupos parlamentarios acuden con la expectativa de un posible anuncio de elecciones anticipadas. En los partidos barajan los días 18 y 25 de noviembre o el 2 de diciembre como posibles fechas electorales

Manifestación en Barcelona

Al salir de su reunión del pasado jueves con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, Mas advirtió de que el portazo a la propuesta catalana de pacto fiscal obliga a abrir una nueva etapa, aunque evitó aclarar antes del debate de política general, que se prolongará hasta el jueves, qué decisiones piensa tomar.

CiU, ICV-EUiA, ERC y SI negocian desde el fin de semana para aprobar una resolución conjunta en favor del derecho a la autodeterminación de Cataluña, mientras que el PSC ha rehusado concretar su postura al respecto hasta que no se conozca el detalle de la propuesta.

La manifestación de la 'Diada' alimentó las reivindicaciones
Las reivindicaciones de Mas no han cesado desde que el pasado 11 de septiembre, cuando más de un millón de personas acudieron a la marcha convocada en Barcelona a favor de la independencia de Cataluña.

La respuesta de los catalanes fue masiva y las reacciones políticas no se hicieron esperar. Solo un día después de la manifestación, Mas aseguraba abiertamente que Cataluña "necesita estructuras de Estado" y llamaba a PP y PSOE a dialogar sobre este aspecto y a plantear la posibilidad de reformar la Constitución.  En cambio, la líder del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, insistía en que hay otra realidad: "seis millones de ciudadanos no quieren la independencia", decía.

Cita en Moncloa para aclarar posiciones
El Gobierno trató de calmar los ánimos y recordó que era el momento de luchar "juntos contra la crisis" y no de "crear un problema dentro de un problema mayor". Muchos acusaban a Mas de doble juego al reclamar un rescate para su Comunidad mientras exigía más soberanismo, e incluso la UE se pronunció para recordar que si se producía una escisión, Cataluña tendría que solicitar su ingreso.

Incluso el Rey emitió un comunicado en la web de la Casa Real para recordar la difícil situación económica que atraviesa España y llamó a luchar contra la crisis "sin perseguir quimeras".

Rajoy recibe a Artur Mas en la Moncloa

PP y PSOE suavizan sus posturas
Mas tenía la situación perfecta para explicar sus peticiones a Rajoy. Ya estaba planeado un encuentro en Moncloa para el 19 de septiembre y podía aprovecharlo para poner sus sugerencias formalmente sobre la mesa. La respuesta fue tajante: "No hay margen para negociar un pacto fiscal".

Sin embargo, la negativa de Rajoy fortaleció más las reivindicaciones independentistas  y miles de personas se concentraron frente a la sede de la Generalitat para recibir a Mas al grito de "¡Independencia!".

Durante el fin de semana se han repetido las mismas consignas aunque comenzaron a suavizarse las posturas. El PP asegura que cualquier medida debe tomarse dentro de la Constitución y Rajoy se mostró abierto a dialogar "en busca de puntos de encuentro". También Rubalcaba mostró su apoyo a caminar hacia "un mayor federalismo".

La pelota está ahora en el tejado del Govern.

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