El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha criticado hoy al fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce, por abrir un expediente al fiscal superior de Cataluña, Martín Rodríguez-Sol, por haber dicho que consideraba legítimo que se consultara a los catalanes sobre su futuro político.
"En este país puede llegar a pasar que un general amenace con la intervención del Ejército y no pase absolutamente nada y un fiscal superior, por decir que un pueblo debe poder expresarse dentro de la legalidad, se le abre un expediente que puede llevar a su destitución", ha dicho el presidente catalán.
En el acto en Barcelona de entrega de los premios a las mejores prácticas en las administraciones públicas, el presidente catalán ha defendido que Rodríguez-Sol es un "buen profesional" con "talante democrático".
"El único pecado cometido, si se puede decir que es un pecado, es que ha aplicado el sentido común y democrático, y ha dicho que cualquier pueblo debería poder expresarse sobre su futuro dentro de la legalidad", ha agregado el jefe del ejecutivo catalán.
Torres-Dulce ha firmado hoy un decreto para iniciar los trámites de sustitución del fiscal jefe de Cataluña, nombrado en julio pasado, al amparo del artículo 41.5 del Estatuto Orgánico del Ministerio Fiscal.
Tras el revuelo suscitado por sus primeras declaraciones, Martín Rodríguez-Sol ha desmentido hoy en un comunicado "cualquier apoyo, directo o indirecto, a un proceso secesionista" y ha aclarado que "no es posible un referéndum sobre la independencia, con el actual marco legal, que comparte, respeta y acata".
