El juez manda a un centro psiquiátrico al detenido por los sobres de ébola

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ENVIÓ LOS SOBRES A DIFERENTES PUNTOS DE MADRID

Un hombre es detenido por enviar cartas con con sangre supuestamente infectada de ébola

El juez ha decretado el ingreso del detenido en un centro psiquiátrico. El hombre envió diez sobres a diferentes instituciones de Madrid unas gasas manchadas de sangre con una advertencia que decía "ébola". Lo cual, obligó a activar el protocolo por por posible riesgo nuclear, radiológico, biológico y químico.

El juez ha acordado el ingreso en un centro psiquiátrico del detenido por haber enviado diez sobres que supuestamente contenían sangre infectada de ébola a numerosas instituciones y medios de comunicación, provocando una enorme alarma social al tener que activarse el protocolo por riesgo biológico.

Fuentes jurídicas han informado de que el titular del Juzgado de Instrucción Número 47, en funciones de guardia, ha acordado el ingreso del detenido, de 41 años, en un psiquiátrico a petición de la Fiscalía por padecer un "trastorno delirante".

El arrestado, que ya había sido detenido en los últimos años por hechos similares y también por desnudarse en una ocasión delante de la reina Sofía en las puertas de un hospital, está acusado de los delitos de coacciones, desórdenes públicos y amenazas.

La Policía le detuvo el pasado martes por supuestamente provocar el pánico enviando sobres con unas gasas rojas, supuestamente manchadas de sangre, y la lectura "ébola", según informa un comunicado.

Esto obligaba a activar el protocolo NRBQ por posible riesgo nuclear, radiológico, biológico y químico y en algunas ocasiones causó crisis de ansiedad entre las personas que abrían las cartas.

Fue con la aparición de un caso del virus en España, cuando el detenido aprovechó para provocar una gran alarma social enviando un total de diez cartas a diferentes puntos de Madrid.

Entre las víctimas se encontraban el presidente del Tribunal Supremo, Carlos Lesmes, el periódico ABC, la Bolsa de Madrid, la sede nacional del Partido Popular, numerosos juzgados mercantiles y una sinagoga. Hasta en dos ocasiones, él mismo actuó como repartidor y entregó los paquetes en mano, con carácter amenazante y sospechoso.

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