El Congreso vuelve a desplazar el busto de Manuel Azaña

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José Bono advirtió contra un nuevo “exilio” del Presidente de la II República

El Congreso vuelve a desplazar el busto de Manuel Azaña

El busto del último presidente de la República, Manuel Azaña, donado por Izquierda Republicana al Congreso, ha vuelto a cambiar de emplazamiento y lleva varios días colocado fuera del Palacio de las Cortes, en un edificio parlamentario situado al otro lado de la Carrera de San Jerónimo.

El busto de Manuel Azaña, obra del artista Evaristo Belloti, permanece en su nueva ubicación desde hace una semana por acuerdo de la Mesa del Congreso. Hasta ahora estaba situado en el Vestíbulo de Isabel II, una de las salas más relevantes de la Cámara en la que había sido colocado en noviembre del año pasado.

El lugar elegido para situar el busto ha sido objeto de polémica desde que el anterior presidente de la Cámara, José Bono, anunció que iba a emplazarse en el vestíbulo principal del Palacio de las Cortes, tras las famosas Puertas de Los Leones, donde también hay una gran escultura de Isabel II que da nombre a la sala. Un mes después de este emplazamiento, el busto, de casi 400 kilos, fue trasladado a otro vestíbulo, el de la segunda ampliación del Congreso, de aspecto mucho más moderno.

La decisión se justificó oficialmente por los preparativos de la solemne sesión de apertura de la legislatura que iba a tener lugar poco después y en la que se abren las Puertas de los Leones. Pero las protestas inmediatas del PSOE hicieron que la escultura y su peana fueran desplazadas nuevamente al vestíbulo de Isabel II, donde ha permanecido hasta la semana pasada.

El nuevo traslado, acordado por la Mesa de la Cámara, ha sido justificado en esta ocasión por un motivo distinto. Se trata de la próxima entrega al Congreso de otra efigie, la del primer presidente de la II República, Niceto Alcalá Zamora, donado en este caso por el ayuntamiento de Priego de Córdoba, su localidad natal.

Cuando el Consistorio comunicó a la Cámara Baja su intención de ceder la escultura, la Mesa decidió que se colocara junto a Azaña en un nuevo lugar, el "hall" de la tercera ampliación parlamentaria, un edificio donde están situadas diversas dependencias del Congreso. En ese recinto ya puede verse un busto de Clara Campoamor, la diputada promotora del voto femenino en España, así como su mesa de despacho.

El anterior presidente del Congreso, José Bono, hizo hincapié en su día en que el lugar escogido para que pudiera contemplarse la escultura de Azaña, "cara a cara" con Isabel II, era "preferente" porque fue jefe de Estado, y advirtió contra cualquier intento futuro de desplazarlo. "Yo creo, dijo Bono,  que no tendría ningún sentido exiliar otra vez a Azaña por  los motivos que se quisiesen inventar".

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