Su nombramiento es histórico en el Tribunal Supremo. Ana María Ferrer se ha convertido en la primera mujer que accede a la Sala de lo Penal. Asegura que "en este aspecto voy abriendo camino y es una satisfacción, pero somos muchas y llevamos mucho tiempo trabajando".
Era la última Sala del Alto Tribunal, creado hace dos siglos, en la que aún no había ejercido una magistrada. En total en el Supremo hay 82 magistrados y sólo 11 mujeres. Algo parecido a lo que ocurre en otras altas instancias. En cambio si atendemos a la suma total de jueces encontramos que hay tantas mujeres como hombres en la carrera judicial. Entonces ¿por qué son ellos los que ostentan los cargos de poder? Gabriela Bravo, perteneciente a la Fiscalía del Estado, lo resume de esta manera: “hasta el año 1966 la mujer tenía prohibido el acceso a la carrera judicial y fiscal. La antigüedad ha funcionado durante muchos años como discriminación.
Los jueces escalan puestos en función de su antigüedad y las mujeres llevan relativamente poco ejerciendo. Pero este panorama va a cambiar cuando lleguen las nuevas generaciones. Sólo en la Escuela Judicial, donde se forman los jueces del futuro, el 70% son mujeres. Por tanto, se prevé un vuelco. En pocos años la justicia estará mayoritariamente en manos de la mujer.
