Ibex 35

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CONSECUENCIAS DE LA CRISIS ECONÓMICA

El valor del Ibex ha caído un 44% desde sus máximos de noviembre de 2007

Tras el estallido de la crisis de las hipotecas "subprime" -de alto riesgo- en EEUU en el verano de 2007, la Bolsa española logró mantenerse ajena por unos meses hasta llegar a marcar máximos en noviembre de ese año.

La Bolsa española ha perdido el 44,07% de su valor desde los máximos históricos de hace ahora nueve años, un periodo que ha estado marcado por la fuerte crisis económica, que llevó al mercado a situarse por debajo de los 6.000 puntos. Las dudas que existían sobre la capacidad de España para cumplir con sus obligaciones financieras provocaron que el principal indicador bursátil, el IBEX 35, se situara en julio de 2012 en los 5.956,30 puntos, mínimos desde 2003, y una cota muy alejada de los máximos históricos del 8 de noviembre de 2007: 15.945 puntos.

Nueve años después, el aniversario de aquellos máximos coincide con las elecciones presidenciales en EEUU, donde se enfrentan la demócrata Hillary Clinton y el republicano Donald Trump. Unas elecciones que se celebrarán después de que en España, y tras dos comicios que han dejado al país con más de 300 días sin Gobierno, finalmente, Mariano Rajoy haya sido investido presidente. En estos nueve años que ahora se cumplen desde los máximos del IBEX 35, mucho ha llovido y mucho ha sufrido la Bolsa española, que se ha visto afectada por la profunda crisis vivida en todo el mundo y los daños colaterales que sigue provocando.

Tras el estallido de la crisis de las hipotecas "subprime" -de alto riesgo- en EEUU en el verano de 2007, la Bolsa española logró mantenerse ajena por unos meses hasta llegar a marcar máximos en noviembre de ese año. Sin embargo, las hipotecas basura generaron dudas entre los inversores y acabaron provocando la quiebra de gigantes como Lehman Brothers y la intervención de numerosos bancos en todo el mundo en 2008, el peor año de la Bolsa española, que perdió casi el 40%.

El cierre del crédito y la desaceleración económica, que se convertía ya en recesión en las principales economías mundiales, se dejaba sentir en el mercado nacional, aunque en 2009 consiguió recuperar parte del terreno perdido un año antes. El BCE comenzó a bajar por aquel entonces el precio del dinero, mientras que en algunos países levemente afectados por la crisis se comenzaban a ver señales de recuperación, unos "brotes verdes" que generaban desconfianza meses más tarde, cuando estalló la crisis de deuda soberana que afectó a los periféricos de la zona euro.

Grecia e Irlanda tuvieron que ser rescatados en 2010 por la Comisión Europea, el BCE y el FMI, posteriormente sucedió lo mismo con Portugal en 2011 y Chipre en 2012. Durante esos años, las revoluciones en el mundo árabe encarecieron el petróleo y los bancos centrales se vieron obligados a tomar medidas para dotar de liquidez al mercado, lo que condicionaba aún más la evolución de la Bolsa española, que vivía con desvelo las dudas sobre la banca.

Finalmente, para evitar la quiebra de Bankia y otras entidades más pequeñas, España tuvo que pedir un rescate financiero y tras ello, las aguas comenzaron a volver a su cauce, aunque lentamente. En 2013, el mercado conseguía sobreponerse a los varapalos recibidos previamente, animado por la recuperación de la actividad económica en España. No obstante, la Bolsa no logró escapar de otros factores que dieron lugar a la inestabilidad, como la situación política de Italia, la posibilidad de que se declarase un conflicto armado en Oriente Medio, o la situación de los países emergentes, además de las dudas que ya por aquel entonces suscitaban las finanzas de China.

Las tensiones entre Ucrania y Rusia, la amenaza de una suspensión de pagos en Argentina, o escándalos de empresas como Gowex, también han dejado mal sabor de boca en el mercado durante estos años en los que la crisis del ébola y la posibilidad de que Grecia abandonara el euro también influyeron en el ánimo inversor. La fuerte caída del precio del crudo, el inicio del alza de los tipos de interés en EEUU y, sobre todo, la decisión de los británicos de abandonar la Unión Europea, el conocido como "brexit", ha terminado de condicionar estos nueve años, en los que a nivel bursátil, la banca ha sido el sector peor parado.

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