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CONSEJO DE MINISTROS

Valeriano Gómez: "El Gobierno prefiere un trabajador temporal a un parado"

El ministro de Trabajo e Inmigración ha defendido el contrato de formación argumentando que "no es un contarto basura". También lo ha hecho José Blanco, portavoz del Gobierno, quien asegura que este tipo de contrato tiene por objetivo "ayudar a los jóvenes que renunciaron a la formación por la burbuja inmobiliaria".

El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, dijo que en una situación como la actual lo importante es mantener el empleo y ha afirmado que el Gobierno prefiere uno "temporal a un parado".

Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que ha aprobado el real decreto ley con las medidas económicas del Gobierno para fomentar el empleo, Gómez respondió así a las críticas que ha recibido el Ejecutivo por la eliminación de la obligación de hacer fijos a los trabajadores que encadenen contratos temporales.

El ministro dijo que el Ejecutivo está gastando todo el presupuesto en mantener estímulos para el empleo y subrayó que durante la crisis lo importante es sostenerlo, sea "fijo o temporal".

Foco sobre el desempleo juvenil
Gómez ha recordado que los jóvenes sufren elevadas tasas de paro y ha precisado que la política laboral no puede ser la misma en períodos de expansión que en tiempos de crisis, cuando es preciso tomar medidas que den flexibilidad a las empresas para que contraten, puedan reducir costes y así facilitar la contratación y el empleo.

El titular de Trabajo ha recalcado que el conjunto de medidas aprobadas se han sometido a la consideración de los interlocutores sociales. Ha señalado que tanto las que "podrían destinarse" para la contratación a tiempo parcial, como las que ahora se han aprobado para el contrato de formación, se han analizado "exhaustivamente" en la mesa de empleo durante los dos últimos meses.

Gómez ha añadido que el Ejecutivo también les ha informado de las nuevas medidas que ha aprobado y ha subrayado que el Gobierno "si de algo puede y debe presumir es de haber mantenido una relación sistemática y estrecha, "de comprensión, apoyo y lealtad" con ellos, sabiendo que al final "hay que gobernar".

Gómez ha insistido en que se ha sostenido un "nivel de interlocución muy importante" durante los últimos años y ha dicho que el diálogo social debe seguir funcionando y cuando no lo haga, "que es legítimo", el Gobierno "tiene que gobernar y esto es lo que ha hecho ahora", teniendo en cuenta las prioridades de la situación social y laboral.

Sobre el nuevo contrato de formación y aprendizaje, que se extenderá a jóvenes de hasta 30 años, Gómez aseguró que tendrá una duración mínima de entre uno y dos años frente a los seis meses actuales, lo que permitirá que pueda prolongarse hasta un máximo de tres años. Con esta medida se incrementará "significativamente" el volumen de contratos formativos que, avanzó, es bajo porque ascienden a 100.000 contratos al año, con una duración media de seis meses frente a los 12 millones de contratos que se firman anualmente.

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