Publicidad

SEGÚN LA JEFA ECONOMISTA DE LA OCDE

OCDE: España debe hacer más reformas para hacer sostenible el crecimiento actual

España es uno de los países de la zona euro que más está creciendo gracias a las reformas llevadas a cabo, como en el sistema financiero, pero para que esa evolución sea sostenible hay que continuar reformando, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).

"Se tienen que realizar reformas" para "hacer sostenible el crecimiento actual en España", señaló la economista jefe de la OCDE, Catherine Mann, en la conferencia de prensa de presentación del informe interino de perspectivas, que no contiene proyecciones cifradas para la economía española.

Preguntada sobre si la fuerte progresión del producto interior bruto (PIB) en países que sufrieron particularmente la crisis como España es un fenómeno temporal, Mann constató que "es uno de los países que más rápidamente crece en la zona euro".

Lo atribuyó a las "reformas estructurales" que se han llevado a cabo, y citó en especial las del sector financiero, que han contribuido al restablecimiento del crédito. Pero puntualizó también que el PIB español sigue estando por debajo del que había al desencadenarse la crisis financiera y que el paro continúa en niveles muy altos.

A su juicio, es preciso hacer más reformas para dar flexibilidad al mercado laboral e introducir mayor competitividad en el mercado de productos.

En su informe, la OCDE considera que la zona euro no se está beneficiando como debería de los estímulos de política monetaria que se traducen en tipos de interés más bajos a largo plazo y de otras condiciones particularmente favorables por la depreciación de su divisa y por el abaratamiento de las materias primas.

Esos elementos deberían aportar alrededor de 1,8 puntos de PIB este año, pero la organización calcula que al final será un punto menos de esa cifra, y el principal motivo es la dificultad para transmitir al mercado del crédito los incentivos monetarios del Banco Central Europeo (BCE).

La forma de corregirlo, según explicó Mann, sería avanzar más en la unión bancaria y combatir la fragmentación del mercado del crédito, entre otras cosas con un reconocimiento más rápido y amplio de los créditos dudosos, como se hizo en Estados Unidos tras el colapso de 2009.

Publicidad