La llave de la aprobación la ha tenido el grupo parlamentario catalán que hasta el último momento no ha fijado el sentido de su voto y que se ha decantado por la abstención por coherencia con su postura en anteriores votaciones de iniciativas económicas del Gobierno.
El resto de grupos que se han abstenido justificaron su decisión por las nefastas consecuencias que habría tenido para la economía española un rechazo del techo de gasto, después de que en las dos últimas jornadas la prima de riesgo de la deuda española se haya disparado por la incertidumbre en torno a las condiciones del segundo rescate a Grecia.
Ante estas circunstancias, la vicepresidenta económica, Elena Salgado, aseguró que "es más necesario que nunca" dar muestra del firme compromiso del Ejecutivo con la austeridad el gasto" y avanzó que es posible que por primera vez el gasto contemplado en los presupuestos no llegue al límite de 117.353 millones de euros, avalado por el Congreso, y que es un 3,8 % menor que el de 2011. Afirmó que esto supondría una muestra más del compromiso del Gobierno con la política de austeridad, aunque eludió relacionarlo con las últimas turbulencias financieras.
Además, hizo hincapié en que pese a la inestabilidad de los mercados las previsiones del Gobierno para la economía española siguen siendo válidas. "Creemos que hay razones para seguir confiando en los parámetros que les presento", aseguro Salgado, que recordó que las previsiones del Ejecutivo para los ejercicios 2009 y 2010 resultaron ser más acertadas que las de la mayoría de organismos y analistas internacionales. Para el portavoz de economía del PP, Cristóbal Montoro, el anuncio de que el gasto presupuestario en 2012 podría ser menor al máximo aprobado resta aún más credibilidad al techo de gasto.
Según el diputado del PP el tiempo político del Ejecutivo socialista ya ha acabado y es urgente "llevar adelante una política presupuestaria que salve las dificultades que estamos sufriendo en estas horas", en referencia a los ataques especulativos contra la deuda española. A su juicio, la responsabilidad de esta situación no debe buscarse en los "poderosos" de Europa, como dijo hoy el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sino que debe llamarse "a la responsabilidad de España".
El portavoz de Economía de CiU, Josep Sánchez Llibre, señaló aspectos "positivos" en el proyecto, pero consideró "totalmente insuficiente" la reducción de gasto planteada. El portavoz del PNV, Pedro Azpiazu, apostó por un reparto equitativo de la austeridad, además de por una aceleración de las reformas estructurales, en especial la del sistema financiero, que consideró clave para trasmitir también confianza y credibilidad a los mercados.
También la portavoz de ICV, Nuria Buenaventura, y el de ERC, Joan Ridao, reclamaron actuar por la vía de los ingresos con cambios en la política fiscal y se quejaron de que se quiera "cargar el muerto" de la reducción del déficit público en mayor medida a las comunidades autónomas, a las que se exigen objetivos más restrictivos. El debate sobre del techo de gasto se trasladará mañana al Senado, donde es probable que sea rechazado porque el PSOE no cuenta con mayoría suficiente, y volverá el jueves a la Cámara Baja para su aprobación definitiva.
