Publicidad

TRAS UN ESTUDIO UNIVERSITARIO

El fraude de Volkswagen se descubrió por casualidad

En 2013 un ingeniero y profesor de la Universidad de Virginia y una ONG especializada en transportes ecológicos realizaron un estudio sobre las emisiones de los coches diesel en Estados Unidos.

De manera casual, así se descubrió el escándalo de Volkswagen. En 2013 un ingeniero y profesor de la Universidad de Virginia y una ONG especializada en transportes ecológicos realizaron un estudio sobre las emisiones de los coches diesel en Estados Unidos.

En el estudio analizaron tres tipos de vehículos, dos de ellos eran del grupo alemán. Tras las pruebas los resultados fueron rotundos. Los Volkswagen emitían hasta 40 veces más de óxido de nitrógeno de lo permitido. Comenzó entonces la investigación para saber cómo era posible que eso ocurriera.


La clave se encontró en el Módulo de control electrónico. Ahí un software analiza varios factores como la posición del volante, la velocidad o el uso del motor. Si determina que el vehículo está siendo examinado en una prueba entra en funcionamiento este depósito que es el encargado de acumular parte de las emisiones, reducirlas y lograr que el vehículo trucada pase las pruebas y cumpla la normativa.

Según algunos expertos, con esta manipulación informática la marca alemana se podría haber ahorrado hasta 600 euros por vehículo.

Publicidad