Los engaños, o intentos de engaño, aumentan. Hay quien ha intentado defraudar a su seguro por una lesión muscular. Reclamó al seguro por una supuesta instalación defectuosa, pero una grabación de vídeo demostró que la culpa de la lesión fue una negligencia suya, al intentar levantar un peso excesivo sin calentar previamente.
Otro caso, también grabado en video, en las imágenes se ve a un hombre cortando madera con destreza, tras pedir la incapacidad total por una supuesta inmovilización de la muñeca; pedía al seguro de su empresa 300.000 euros.
Son demandas personales, que empiezan a disminuir, y cada vez es más fácil ver la trama. Sin embargo crecen los denominados casos de tramas organizadas. En 2013 se realizaron siete; el pasado año fueron 45 los que contaron con la intervención de profesionales: "Son fraudes que dirigen profesionales como letrados o peritos, gente que conoce el sector" explica Arturo López-Linarez, responsable de la gestión de fraude de AXA.
Los fraudes más comunes, siete de cada diez , se cometen en el sector del automóvil. Le siguen los del hogar y los del trabajo. Los menores son los que afectan al transporte y la industria. La comunidad en la que más se defrauda es Andalucía y en la que menos Madrid.
