El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha rechazado intervenir judicialmente Bankia, ya que según el auto emitido, dicha intervención no se justifica al haber evitaado la continuación delictiva ya que la cúpula de la administración de Bankia y de su matriz BFA "es completamente distinta" a la del momento en el que se cometieron los hechos que se investigan.
Esta querella fue presentada por Unión, Progreso y Democracia (UPyD) y el colectivo 15-M. Ambos colectivos reclamaban además el cambio en los gestores del grupo alegando que podrían destruir pruebas, pero esta petición tampoco ha sido admitida ya que el juez señala que Bankia y BFA son entidades que ya están intervenidas "de facto" por el Estado, tras la entrada en su capital del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria.
Según el juez, la intervención no se justifica por evitar la continuación delictiva puesto que la actual administración de Bankia "es completamente distinta a la que se encontraba al frente de la entidad cuando se cometieron los hechos objeto de la investigación", así como que Bankia es, de facto, una entidad intervenida por el Estado a través de una entidad de derecho público como es el FROB.
La Fiscalía Anticorrupción se opuso el pasado miércoles a la petición y advirtió que esta medida "temeraria" pondría en riesgo a la economía nacional. El Ministerio Público defendió, además, que ninguno de los dos querellantes gozaba de legitimidad para pedir una medida de este tipo.
La semana pasada tuvo lugar en el Congreso la ronda de declaraciones y justificanciones al respecto de Bankia. Por esa Comisión de Economía, pasaron Rodrigo Rato que señaló al Gobernador del Banco de España en aquel entonces como el que le conminó a sumar Bancaja a la fusión que estaba llevando a cabo Caja Madrid. La ex ministra Elena Salgado también compareció y según sus palabras hasta 2009 no se vio que la banca podría tener problemas.
