La Policía Nacional ha detenido a 36 personas de una red que pretendía introducir desde Marruecos ocho toneladas de hachís en barco por la zona de la desembocadura del río Guadalquivir, droga que procedía en parte de otros narcotraficantes a los que asaltaban a punta de pistola o disfrazados de policía.

La organización criminal tenía su base en la provincia de Cádiz y pretendía introducir en la Península 8.560 kilos de esa droga.

En la operación descubren que los narcotraficantes han robado droga a otras bandas, recurriendo a la violencia y utilizando distintivos falsos  para hacerse pasar por policías. Además son intervenidos 17.000 euros en efectivo, tres pistolas y siete vehículos son intervendidos en los diferentes registros domiciliarios.

La organización criminal operaba en Cádiz y Sevilla y hay 36 miembros detenidos, entre ellos los cabecillas de la banda.

La investigación se inició el pasado mes de agosto cuando los agentes detectaron una red que podría estar usando la zona de la desembocadura del río Guadalquivir para meter droga en el país. En una primera fase de la operación se interceptaron seis alijos de estupefaciente, que eran transportados en grandes embarcaciones semirrígidas de gran potencia, pesqueros o embarcaciones de recreo.