La selección española luce la plata en baloncesto

Publicidad

BALONCESTO | ESPAÑA 52 - 68 EEUU

España logra la plata en baloncesto y roza el milagro ante Estados Unidos

La selección española de baloncesto en silla de ruedas ha logrado una plata histórica en los Juegos Paralímpicos de Río y a punto estuvo de rozar el milagro contra EEUU. Los españoles salieron muy motivados pero el poder ofensivo de los norteamericanos fue superior.

La selección española de baloncesto en silla de ruedas hizo historia en Río de Janeiro al lograr su primera medalla en unos Juegos Paralímpicos tras caer derrotada en un duelo muy disputado hasta el tercer cuarto con Estados Unidos. Al derrotar a Gran Bretaña en la semifinal, Pablo Zarzuela lo dejó claro: "No me conformo con la plata, hemos venido a ganar". Esa consigna del jugador español fue el sentimiento de un grupo que ya solo peleando por el oro había hecho historia, pero quería escribir el cuento completo.

Motivados al máximo, los jugadores españoles salieron a la pista creyendo en sus posibilidades y durante el primer cuarto llegaron a gozar de varias ventajas en el marcador, la máxima de cuatro puntos, aunque al final el poderío ofensivo de Estados Unidos salió a relucir (8-12). El inicio del segundo cuarto fue bueno para España, que logró igualar a doce el marcador con una canasta de Asier García, aunque unos minutos de mucho acierto de Estados Unidos le hicieron tener una desventaja de seis puntos.

La salida de Jordi Ruiz a la pista dio otra variante al juego de la selección española, que, aunque se mostró acertada en ataque, no pudo frenar el acierto exterior de los americanos, sobre todo de Jake Williams, que metió un triple en el momento clave del segundo cuarto (23-29).

Tras el descanso, Estados Unidos anotó cuatro puntos, amplío la diferencia a diez y metió a España en un problema del que supo salir con una buena defensa y mucho oficio en ataque de los hermanos Zarzuela, Alejandro y Pablo. Otros dos triples de Jake Williams cuando España había vuelto a acercarse en el marcador a tres supusieron un soplo de aire fresco momentáneo para Estados Unidos, que nunca terminó de sentirse cómoda sobre la pista ante el marcaje defensivo que los españoles hicieron silla a silla (42-47).

Las imprecisiones en ataque del equipo español al inicio del último cuarto provocaron que Estados Unidos volviera a marcharse en el marcador con diferencias de hasta catorce puntos, una diferencia que se antojó insalvable para España, que cayó dignamente frente a una de las mejores selecciones del mundo.

Publicidad