Luis Suárez celebra un gol

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LIGA JORNADA 28 | MÁLAGA 0-2 BARCELONA

El Barcelona gana al Málaga por la vía rápida sin Messi y con la mente pensando en la Champions

El Barcelona tiene la Liga un partido más cerca. Los culés vencieron al Málaga con dos goles en apenas 25 minutos para sestear durante toda la segunda parte en un encuentro que los albicelestes jugaron con diez durante una hora. Suárez y Coutinho, con un golazo de tacón, marcaron para los de Valverde.

No hubo sorpresa en el partido que enfrentó al último contra el primero. No hubo opción a ella incluso aunque Lionel Messi estuviera lejos de Málaga disfrutando de su recién nacido Ciro. Sin el argentino, al Barcelona le sobraron 45 minutos para finiquitar a un rival que jugó con diez durante más de una hora. Cero a dos, tres puntos, y las buenas noticias de Coutinho y de un gran Dembelé. Noche redonda para el barcelonismo.

Ni falta le hizo Messi al Barcelona. Padre por tercera vez de un niño que viene con victoria bajo el brazo. Que llega al mundo con tres puntos más que merecidos para un Barça que en todo momento demostró por qué es primero en La Rosaleda aun con la siesta total de la segunda parte. Que controló por completo a un rival que con cada partido que pasa siente más cerca el 'infierno'.

Porque el Málaga no pudo. Simplemente no pudo. Persiguiendo sombras, los malacitanos no encontraban a otro jugador con su misma camiseta y el Barça disfrutó. Disfrutó de su fútbol y, por fin, de Ousmane Dembelé. El francés fue un puñal por la derecha. Se gustó. Se gustó muchísimo. Con confianza, demostró que bueno es con fintas, recursos y acciones que denotan que lo que necesita es confianza.

Precisamente de sus botas salió el segundo gol. El galo, con un recorte excepcional que dejó sin cintura a su par para ponerle un balón a Coutinho que el brasileño remató con el tacón. Sí, con un recurso de clase y de calidad, y es que el Barcelona disfrutaba al mismo tiempo que hacía sufrir a un Málaga que ya recibió el primero con un cabezazo de Luis Suárez. Eso sí, más de medio gol fue de Jordi Alba.

Parecía que las cosas no podían salir peor para el Málaga, pero sí. Samu García se fue a la calle con roja directa precisamente por una patada al lateral de Hospitalet. Y con diez jugadores las dos ocasiones que tuvieron, clarísimas, las mandaron al limbo ante un Ter Stegen que vio cómo Roberto, su rival de portería y compañero de faenas, dejaba el 0-2 en el luminoso al descanso a pesar de las insistencias de Suárez y Coutinho.

En la segunda parte el plan del Barcelona estaba claro: dejar pasar el tiempo y sufrir lo menos posible. Para ello, nada mejor que posesiones largas. Y las tuvieron, muchas. Y casi todas ellas de considerable duración. Eso sí, el ánimo ofensivo era el justo y solo Dembelé parecía animarse. Coutinho y Suárez, desde fuera, probaron a Roberto ante un Málaga que no perdió la cara.

Que sabía que si ya con once la misión era harto difícil con diez estaba incluso peor, y que tuvo incluso que escuchar algún que otro '¡olé!' desde la grada cuando trenzaba pases. Tuvieron un par, pero como en el primer acto se fueron al limbo.

Con Luis Suárez rozando la roja por una, por otra, patada sin balón y protestando la amarilla recibida, el encuentro fue llegando lentamente a su fin hasta que el árbitro señaló el por todos esperado final. El Málaga sigue en la UVI; el Barcelona ya no tiene por qué disimular que tiene al Chelsea en su cabeza. Con Messi, y con Suárez, Coutinho, Busquets, Sergi Roberto, Piqué... más un Dembelé recuperado para la causa.

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