Isabel Muñoz, amor y éxtasis en Siria o Irak

En 43 imágenes y 5 audiovisuales, esta fotógrafa ha conseguido atrapar con su cámara los bailes de los derviches giradores, en las que los colores rojo, blanco y negro llaman la atención del espectador por su viveza.

El visitante también se sentirá atraído por otro tipo de instantáneas que reflejan la dureza de una reunión de adeptos de la cofradía Al Qadiriya, en las que se observa cómo estos hombres tragan cristales y cuchillas de afeitar y se hieren con puñales.

El montaje de esta muestra, que es gratuita, ha contado con la colaboración de Blanca Lleó y con él se pretende introducir al público en una experiencia en la que se unen espacio y sistemas audiovisuales para estrechar el vínculo entre el espectador, la fotógrafa y el sujeto de su obra.

Este trabajo de Muñoz se centra en la investigación que ha llevado a cabo de las formas humanas a través de imágenes de fragmentos del cuerpo o de instantáneas de guerreros, toreros y bailarinas. La propia fotógrafa explicó hoy durante la inauguración de la exposición que su objetivo era dar a conocer la similitudes de esta cultura con la española durante el siglo de Oro.