Centenares de turistas visitan de nuevo el Monumento catalán después de que un incendio en la sacristía de la cripta obligara a evacuar a 1.500 personas y dejara a cuatro heridos leves intoxicados por humo. Los primeros turistas han entrado a las 17 horas por las taquillas de la fachada de la Pasión como es habitual tras pagar su entrada, tomando fotos desde el primer minuto y la mayoría ajenos al incidente de esta mañana.
La cripta de la nave central de la Sagrada Familia ha quedado muy dañada por el incendio, al parecer provocado por un hombre de 65 años, han indicado fuentes del patronato, según las cuales el fuego no ha afectado a los vitrales de Gaudí.El incendio ha calcinado totalmente la sacristía del templo y la gran cantidad de humo generada ha ennegrecido la cripta, ha relatado a su vez el jefe de guardia de los Bomberos de Barcelona, Miguel Ángel Fuente.
El presidente del patronato, Joan Rigol, ha informado de que el incendio se ha producido sobre las 10.45 horas en el interior de la cripta, en concreto en la sacristía. En ese lugar, había unos siete u ocho turistas que presenciaron cómo un hombre, que, según las primeras investigaciones podría ser un indigente con problemas mentales, quemaba las vestimentas de sacerdotes que se guardan allí, y lo retuvieron para evitar que huyera, ha dicho.Tras el suceso, el presidente del patronato ha adelantado que será necesario hacer un replanteamiento de las medidas de seguridad en el templo, Patrimonio de la Humanidad.
Un 'perturbado' con antecedentes
El presunto autor del incendio ha sido identificado como José María L.S., un hombre conocido de los servicios sociales que acumula dos arrestos previos por hurtos, según han informado fuentes de la investigación.
El hombre, de nacionalidad española, detenido tras producirse el incendio, es un usuario habitual de los servicios sociales, aunque no se trata de un indigente, según han precisado las mismas fuentes. Al parecer, el hombre arrestado, que permanece bajo custodia en la comisaría central de los Mossos en Les Corts, ha negado ser el autor del fuego. El individuo, que había sido detenido en dos ocasiones por hurto, ha sido hallado escondido en la sacristía, con mecheros y trapos en sus bolsillos.
