Todo este éxito se lo debe a su dueña Sonya Yu que se encarga de vestir y fotografiar a Trotter. La perra parece encantada con sus disfraces y siempre posa con paciencia.
En una entrevista Yu explicó que Trotter "Es muy paciente. Siempre se queda quieta posando cuando le pongo todos los accesorios. Como es muy obediente sólo necesito unos pocos disparos para conseguir la fotografía perfecta".