El pasado no se equivocaba tanto al recrear el futuro, pero no se lo imaginó tan limpio... Los Eco-rascacielos son autosuficientes y pueden generar energía por sí mismos. Por eso, se han convertido en los edificios de diseño más ecológicos.
El Strata de Londres es el primer gran rascacielos ecológico; incluye turbinas eólicas, que producen el 8% de la energía que consume, como el pionero World Trace Center de Bahrein y sus pasarelas con molinos.
La torre Cuatro en Uno es todavía un boceto pero se construirá en China y su cubierta verde reciclará el agua de lluvia.
También existen torres móviles de diseño que están pensadas para el Golfo Pérsico, pero sus autores no las descartan para París o Londres. Sus partes móviles aprovechan mejor la luz y ahorran energía.
Si llega a ser una realidad, otro edificio, el Dragonfly de Nueva York contará con 28 áreas de cultivo.
Los Eco-rascacielos también tienen nombre español. Hay edificios autosuficientes, como uno que podría acabar junto al río Manzanares aunque antes, tendrá otro reto, más negro que verde: encontrar financiación.