Gota de agua creada

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UNIVERSIDAD BRIGHAM YOUNG

Dos investigadores consiguen crear una gota de agua que rebota y rueda como una pelota

Este fenómeno se produce porque los investigadores han creado un canal inclinado que es súperhidrofóbico, extremadamente difícil de humedecer. En términos sencillos, es la forma más extrema de la prueba del agua.

En un laboratorio en los sótanos del campus de la Universidad Brigham Young, la profesora de ingeniería mecánica Julie Crockett analiza el agua mientras rebota como una pelota y rueda por una rampa.

Este fenómeno se produce porque Crockett y su colega Dan Maynes han creado un canal inclinado que es súperhidrofóbico, extremadamente difícil de humedecer. En términos sencillos, es la forma más extrema de la prueba del agua.

Ingenieros como Crockett y Maynes han pasado décadas estudiando superficies superhidrofóbicas debido a la gran cantidad de aplicaciones para la vida real. Si bien algunas de estas investigaciones han desembocado en productos comerciales que mantienen los zapatos secos o evitan que el aceite se acumule en los pernos, estos científicos están descubriendo características orientadas a soluciones de gran envergadura para la sociedad.

Su estudio reciente sobre el tema, publicado en la revista académica de Physics of Fluids, encuentra superficies con un patrón de crestas microscópicas que, en combinación con un recubrimiento hidrofóbico, produce un mayor nivel de resistencia al agua dependiendo de cómo el agua llega a la superficie.

"Nuestra investigación está dirigida a ayudar a crear la superficie superhidrofóbica ideal", dijo Crockett. "Al caracterizar las propiedades específicas de los diferentes acabados, podemos saber con precisión qué tipo de superficies son más ventajosa para cada aplicación".

Aplicación a la producción de energía
Su trabajo es fundamental, ya la lista de aplicaciones para las superficies superhidrofóbicas es muy diversa: paneles solares que no se ensucian o se autolimpian; biodispositivos médicos, tales como el interior de tubos o jeringas; los cascos de los buques, exterior de torpedos y submarinos; alas de los aviones que resistirán la formación de hielo en condiciones húmedas frías, etc.

Pero la investigación Crockett y Maynes se centra en la generación de energía más limpia y eficiente. Gran parte se produce por combustión de carbón o gas natural para crear vapor que se expande y hace girar una turbina. Una vez que ha ocurrido, el vapor debe condensarse de nuevo en un estado líquido que debe ser retornada.

Si los condensadores de plantas de energía pueden ser construidos con superficies superhidrofóbicas óptimas , ese proceso se puede acelerar en forma significativa, ahorrando tiempo y reduciendo los costos para generar energía.

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