Alonso termina tercero y cede el liderato a un Vettel imparable en Corea

La batalla de Corea se ha perdido, pero la contienda entre Alonso y Vettel por el Mundial de F1 sigue su curso. El Red Bull ha demostrado su actual poderío en la parrilla sobre Yeongam sí, totalmente cierto, y eso ha permitido a Sebastian ganar la prueba seguido de Webber, pero Ferrari no se ha quedado atrás y Fernando ha sido tercero con Massa detrás.

Porque esta vez sí, esta vez la salida fue limpia para el español. Esta vez, aún con los más que notables nervios que llenaban las mentes de todos al recordar lo sucedido en Suzuka, el asturiano no sólo no tuvo ningún toque sino que además pasó a Hamilton a pesar de salir por la zona sucia, o por la zona muy sucia, del trazado surcoreano.

A punto estuvo de hacer lo propio con Webber que, como estaba previsto, no tardó en ceder su puesto a Sebastian Vettel para que el alemán tuviera otra de esas plácidas carreras que le gustan aún protagonizando algún que otro absurdo bloqueo de neumáticos y alguna salida de pista. Pero no pudo con el australiano.

Y eso que lo intentó todo, y estuvo muy cerca. Excesivamente cerca viendo cómo es el Red Bull, un monoplaza inalcanzable, y cómo es el Ferrari, un gran monoplaza que está al rebufo del de las bebidas energéticas. Pero aún así le tuvo ahí, le tuvo cerca. Le estuvo recortando décima a décima hasta ponerse a casi un segundo.

Al menos hasta la segunda parada, cuando Webber ya se puso las pilas y se dejó de medias tintas. Y fue tras esa última pausa para poner el último juego de neumáticos en Corea cuando vimos al mejor Massa. Un Massa que volaba, que se acercaba por fin al rendimiento del Ferrari de Alonso y que recordó a aquel que casi logra un Mundial en 2008.

Vettel, imparable
Era rápido sí, pero para rápido Sebastian Vettel, que se pone como nuevo líder del Mundial, de momento, y que se encontró con otra de esas carreras que a él le encantan. Una de esas en las que aunque no tuvo la pole era como si la tuviera y en la que sólo se tuvo que preocupar de tirar hacia adelante y de no cometer errores.

Aún así los cometió, y es que aunque no le hacía falta el alemán se gustó a sí mismo en algunas vueltas. Era como si jugase con su Red Bull y con sus propios rivales. De repente hacía un mal giro, un giro en el que incluso perdía tiempo con sus perseguidores, para más tarde hacer otro en el que metía seis décimas al resto.

Carrera para olvidar de Hamilton
Y qué bien le habrían venido esas seis décimas a Hamilton, el gran perdedor de Corea. Porque Lewis casi puede decir adiós al título, por no decir que ya lo ha podido decir. Todo salió mal en McLaren, en el único McLaren que seguía en pista tras el abandono en primera vuelta de Button por un toque con Kobayashi.

Desde el comienzo Hamilton estuvo en pista y al mismo tiempo no estuvo en ella. Fernando le superó y tras la primera de sus tres paradas, tres, se perdió. Lento, superado por todos y luchando en pista no con Red Bull, sino con los Toro Rosso para poder puntuar. Y es que entre bloqueo y bloqueo de neumáticos se llegó a llevar un trozo de moqueta verde de este circuito tan peculiar.

En puntuar el maestro es Raikkonen. Kimi suma y sigue tercero, a la estela de los que a priori son los dos claros candidatos a hacerse con el título. El finlandés salía quinto y quinto ha terminado, en otra carrera de las suyas, muy regular. A este paso el de Lotus no se va a librar de acudir a la ceremonia de los tres primeros de la F1...

Los que no deberían acudir a ninguna ceremonia de premios son los comisarios de este Gran Premio. Hasta nueve vueltas tardaron en retirar una bandera amarilla provocada por el abandono de Nico Rosberg, que paró su Mercedes en la zona de DRS y que hizo a los pilotos preguntarse si dicha bandera iba a estar durante toda la carrera.

De la Rosa se retiró en su primera parada
En cuanto a HRT, una de cal y otra de arena. Con los Marussia del todo inalcanzables en Yeongam, el objetivo era terminar. Y sólo uno pudo terminar, y fue el de Karthikeyan. De la Rosa no pudo completar su primera carrera en Corea y tuvo que retirarse al realizar su primera parada en boxes, parada de la que nunca llegó a salir de nuevo a pista.

La siguiente cita por el Mundial, por saber quién será el tricampeón más joven de la historia de la F1, salvo que Raikkonen dé la sorpresa, será en el GP de la India, una carrera en la que el Ferrari estará de nuevo a examen y en el que volveremos a disfrutar de este duelo entre Vettel y Alonso, un duelo en el que los dos venderán cara su derrota.