La mística de Florence se suma al aquelarre de Crystal Fighters en el FIB

Florence, con y sin máquina, es una vestal que flota en el escenario. Movimientos suaves como si el viento, escaso e hirviente, le bailasen. La espiritualidad no se queda en la puesta en escena; es sello Florence. Así, para arrancar nada mejor que un 'What the water gave me' –Lo que el agua me dio-. Sin pararnos en la letra –amor, olvido, recostamientos...- la británica demuestra un imperio de timbre que no cesa en todo el bolo.

El FIB, as usual, es colonia británica y por momentos se agradece: disfraces peculiares, sonrosado facial y se saben los temas (triunfa el sonido Brit). Con el coreo de compatriotas Florence deambulaba de tema en tema ('Ship to Wreck', 'Shake it Out', 'Rabbit Heart'...)

'Cosmic Love' mete una marcha más a la noche y 'Delilah' acelera. 'Sweet Nothing' –tras 'St Jude'- añade dance y el escenario Las Palmas cambia los arrumacos por el baile. Tras la tempestad interludio de tranquileo con 'How big How blue How beautiful' para reanimarse con 'La Reina de la Paz' –'Queen of Peace'-.

Resulta distintivo como por momentos desconecta con el público para seguir a su rollo piadoso y por otros se enchufa y sube a una niña al escenario a la que atiborra a abrazos (llevaba un cartel de 'abrázame') o se patea escenario y foso con una bandera gay.

El tramo final nos deja 'What kind of man', 'Drumming Song', 'Spectrum', 'You've got the love' y un cierre entusiasta con 'Dog Days Are Over'. 'Spectrum' no defraudó –Say My Name...- con su ritmo discotequero y 'Dog Days Are Over' descorchó el champán de un concierto emocionante que se hizo corto.

CRYSTAL FIGHTERS, FIESTA, ROCK Y SUBIDÓN
Titular con 'aquelarre' una crónica sobre Crystal Fighters es un recurso fácil y ajado –sobre todo tras su rave en Zugarramurdi en 2013- pero pocas palabras pueden describir mejor lo que esta banda inglesa con influencias vascas monta sobre un escenario.

Se iniciaron con 'Solar System'. Sintetizadores, efectos, guitarreo rockero... Subidón y lleno para ver a los colegas del Crystal y es que tanto ritmo sobre un escenario se contagia rápido al patio.

Once temas, el timing de un festival manda, explosivos y siempre cambiantes para terminar con 'Xtatic Truth', un pogo masivo de chicas a hombros bailando con desenfreno. Tras esto solo tocaba respirar y esperar a que Florence nos resucitase.

RUSSIAN RED ACOMPAÑA A L.A. Y ROBERTO MERHI SE BATE AL PIMPÓN
Pero el FIB es mucho más. De la música patria destacan los baleares L.A. Su rock en inglés gustó y mucho a los nativos. Contaron con el fichaje de Russian Red –otra sacerdotisa pelirroja ya conocida por Benicasim-.

La crónica social nos deja a Roberto Merhi jugando al pimpón con amigos -recuperado tras su accidente en las World Series-, a Víctor Claver disfrutando de la música y a youtubers risas como Loulogio (seguro que de esto hará vídeo y más divertido que leerse este tostón).

Esta noche el cartel lo lideran The Prodigy y Noel Gallagher aunque yo me quedo con Palma Violets.